La Historia de Cú Chulainn comienza con un niño de inmenso poder llamado Sétanta. Destinado a la grandeza, viajó a la corte de su tío, el rey Conchobar mac Nessa. Un día, en defensa propia, mató al temible perro guardián del herrero Culann. Lleno de remordimiento al ver el dolor del herrero, el joven Sétanta hizo un juramento. Él mismo protegería las tierras de Culann hasta que un nuevo perro pudiera ser criado. Desde ese momento, fue conocido como Cú Chulainn, «el Sabueso de Culann».
Como campeón de Úlster, la fama de Cú Chulainn creció. Su momento más legendario llegó durante la Incursión del Ganado de Cooley (Táin Bó Cúailnge). Mientras los hombres de Úlster estaban incapacitados por una maldición, la reina Medb de Connacht invadió para robar un toro premiado. Cú Chulainn, siendo inmune, defendió él solo toda la provincia. En el campo de batalla, era poseído por una furia monstruosa, el ríastrad, que lo convertía en un guerrero invencible.
Sin embargo, hasta el héroe más grande tiene un destino. Los enemigos de Cú Chulainn, liderados por los hijos de Calatin, conspiraron para debilitarlo. Lo engañaron para que rompiera sus geasa, sus juramentos sagrados, dejándolo vulnerable. A pesar de ser herido de muerte en su última batalla, Cú Chulainn ató su cuerpo a una piedra para poder morir de pie, enfrentando a sus enemigos hasta el final. Su acto final selló su leyenda como el espíritu indomable de Irlanda.

La Historia de Cú Chulainn es un poderoso relato sobre la responsabilidad y el destino. Su decisión de convertirse en «el Sabueso de Culann» nos enseña que un gran carácter no se mide solo por la fuerza, sino por la capacidad de asumir las consecuencias de nuestras acciones. Un error de juventud lo transformó en el protector de su pueblo. Nos recuerda que la verdadera grandeza a menudo nace de la humildad y el honor.
Además, su caída nos ofrece una lección sobre la vulnerabilidad. Cú Chulainn era casi invencible en combate físico, pero fue derrotado a través de la manipulación de sus principios y su honor. Esto nos muestra que nuestras mayores fortalezas y nuestras debilidades a menudo están entrelazadas. Su determinación de morir de pie simboliza la dignidad final, enseñándonos que la forma en que enfrentamos nuestros desafíos define nuestro legado. Es un pilar de la cultura celta.
Ciclo del Úlster: Es una de las cuatro grandes colecciones de la mitología irlandesa antigua. Se centra en los héroes del reino de Úlster y sus conflictos, especialmente con el reino de Connacht. La figura central de casi todas estas historias es Cú Chulainn.
Táin Bó Cúailnge: Se traduce como «La Incursión del Ganado de Cooley». Es la historia central del Ciclo del Úlster y el poema épico más famoso de la literatura irlandesa. Narra la guerra iniciada por la reina Medb de Connacht para robar el toro más fértil de Úlster.
Ríastrad: (También conocido como warp-spasm o espasmo de furia). Es la transformación monstruosa y sobrenatural que sufría Cú Chulainn en el fragor de la batalla. Se describe como una distorsión física horrible que lo convertía en una máquina de guerra invencible, perdiendo toda apariencia humana y llenándose de una furia incontrolable.
Geasa (plural de geis): Son juramentos, prohibiciones o tabúes sagrados y a menudo misteriosos que un héroe irlandés debía seguir. Romper una geis traía deshonor, desgracia o incluso la muerte. Los enemigos de Cú Chulainn lo engañaron para que rompiera las suyas, como la prohibición de comer carne de perro, lo que lo debilitó fatalmente.